Mi prisión laboral

Mi prisión laboral 

Me siento prisionera

entre rejas invisibles.

De ser libre no hay manera,

y me llaman inservible.

No soy menos válida

por no aguantar tú mal humor.

No soy menos válida,

¡valora mi sudor!

Entre dos decepciones me encuentro,

sin saber qué quiero hacer con mi vida.

Ya estuve en el otro extremo 

y ahora parece la salida

de este mundo hipócrita y malhumorado,

los gritos duelen y las formas también.

Tengo una minusvalía por no querer adaptarme

a este mundo cruel, ¿dónde estará el honrado?

¿Dónde la gente que no quiere lastimar,

dónde la que no piensa en ella nada más?

¿Dónde la bondad no medida a medias,

donde puedo encajar sin mis invisibles rejas?

Andy López