perladamente bello

Composiciones imperfectas de las que al leerlas sientes y conectas con un mundo lleno de perlas. Perlas puras, brillantes, que nacen de la naturaleza del ser que las proyecta. Dejándonos espectantes. Naturalmente somos sentimiento y eso hace que escribamos lo que sentimos y añoramos, lo que amamos desde dentro. Hechamos flores al mundo, flores perladas, inexistentes, que brillan más que las presentes, haciendo bello hasta lo inmundo. Letras ardientes enseñan un mundo imperfecto en composiciones no tan perfectas haciéndolo idílico, utópico... O perladamente catastrófico.